Relatos breves, poemas y paridas varias

Saturday, March 04, 2006

DepiLady
Esta tarde he ido a ver a la depiladora asesina, ¡qué miedo he pasado! Esta señora cuando coge la espátula llena de cera se vuelve un monstruo, le cambia la cara, echa espuma por la boca.
Los enanitos que viven en mis sobacos habían desarrollao ya mucho pelo. No puede ser.
Cuando llegué a la peluquería, había allí como cinco peluqueras con sus respectivas viejas enruladas que pretendían hacerse la permanente. Le dije a la que estaba mas cerca del mostrador: ‘¡Hola!’ (Que maja yo) ‘Vengo a…’
Total, que antes de acabar de manifestarme sale la preñada y me dice, ‘¡Sí! ¡A hacerte la cera!’….. ¡Que miedo! Me tienen calada….
-¡Pasa, pasa que la cera esta caliente!… Vete desvistiendo que voy a buscar mas incienso que se me ha acabado.
Va la muchacha a por sus barritas, vuelve y me examina con la vista.
Se lo piensa mucho y al final declara:
-‘¡Veo que hace tiempo que no nos depilamos, ehh! No se puede ir así por la vida mujer… Y si se te presenta una buena oportunidad y no vas arreglada qué….
Y ahí estaba yo, medio en bolas y sentada en la camilla sintiéndome el Yeti. Anhelando ser una persona con piernas sin barba. Ay que ver el arte que tienen algunas personas para hacerte sentir mal.
Ella con su arte, coge la espátula llena de cera y… ¡ZA ZA ZA! Ni un pelo.
-¡Ah mira! Parecía que tenías el vello muy duro, ¡pero sale bien eh!Eso ya lo sabía yo, ¡home! Sabré como son mis pelos que los cuido y los mimo durante meses para que un día….¡ZA ZA ZA! Que vida mas dura…
Ahora, esta vez venía preparada, no como la otra vez, que me echó la bronca porque había venido a depilarme con bragas en vez de con tanga…. Que extrañas manías.
Lo único que no se puede solucionar nunca es no romper el papel continuo de la camilla con el culo. Y encima después la depil-woman te mira mal, porque piensa que tienes el culo gordo. Después de la pechá de sudar que te pegas intentando no chillar cada vez que ella hace ¡ZA ZA ZA,! ¡normal que te sude el culo! ¡y normal que se rompa el papel debajo de tu culo sudao!... ains… si es que la gente la puede la vanidad. Joer que mal se siente una cuando se va a depilar.
Ahora ya por lo menos se han ido los enanitos barbudos del sobaco…
Además la charla de la señora es bastante circunstancial, y yo pues le sigo el rollo porque pienso, (¡Pobre mujer! Aquí todo el día depilando Yetis…)
-¡Qué frío hace ya eh!
-¡Uy sí! Yo es que no soporto el frío, yo soy más de verano.
-Oye, estás preñada, ¿no? (y rezas para no haberla cagado y que esa barriga sea tocino del bueno…)
-¡Sí! Estoy de 4 meses. (…ufff, menos mal…)
-¡Felicidades!
-Muchas gracias, si es que yo tenia ganas de quedarme ya otra vez sabes….¿puedes darte la vuelta que te voy a hacer los glúteos? ( y ahora es cuando coge carrerilla) Pues si mira si, la verdad es que con la cantidad de métodos anticonceptivos que hay ahora no sé como las niñas son tan tontas de quedarse preñadas por accidente, aunque bueno, también es que les gusta hacer las cosas mal eh… ¡Yo tenía un colega que lavaba los condones! ¿Quieres que te de un consejo? Si ligas con uno que no conoces, lleva tu los condones porque hay tíos súper guarros por ahí ….¿te puedes sujetar abiertas las nalgas mientras te pongo la cera? (¡QUE FUERTE! ¿Me esta diciendo que me abra el culo? ¿Y que su colega lava condones? Que asco…) ¡ZA ZA ZA! (Ahora entiendo lo del tanga…)
¡ZA ZA ZA! …Ahora si que tengo el culo como el de un bebé… Bueno, mirado por el lado positivo ahora mis calvos serán mas bellos, ¡jajajaj!
Ya casi ha terminado conmigo. Ya me he acostumbrado a que me sobe entera y después del sobamiento notar un terrible dolor en todo el cuerpo. Y ya nada más puede ser peor que eso. Estoy hecha polvo, pero divina de la muerte. ¡Antes muerta que sencilla! Como decía la niña esa repipi.
Pero…(música terrorífica) aun queda el bigote….¡Se me había olvidao el bigote!
-Perdona, ¿me puedes hacer también el labio?
-¡Qué raro que me digas labio! Todo el mundo me dice bigote….
-Bueno, ¿pero me lo haces?
-Sí claro, voy a buscar la cera para el labio.
Aprovecho para ponerme los pantalones. Me levanto y observo los restos rotos de papel continuo en la camilla. Soy un monstruo.
Viene la cera directo a mi bigote. ¡Ostras, qué caliente!
-¿Esta calienteeee…..??
-Nooo…. No mucho.
¡Ya estoy lista! Me visto, me miro en el espejo y tengo el bigote rojo. Sigo siendo un monstruo, pero un monstruo calvo, ¡oiga!.

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